Jean Rédélé, el fundador.
Jean Rédélé nació el 17 de mayo de 1922 en una familia apasionada por los deportes de motor. Tras superar brillantemente sus estudios, a los 24 años tomó las riendas de un concesionario Renault en Dieppe, su ciudad natal. Perfeccionó sus competencias de ingeniero y piloto en el mundo de las carreras, consciente de que el deporte automovilístico permite demostrar las capacidades de sus vehículos, un enfoque que allanará el camino a vehículos deportivos muy especiales.
Modestos comienzos
El Renault 4CV suele considerarse el vehículo familiar de posguerra por excelencia, pero Jean Rédélé intuyó que tenía más potencial y mejoró las prestaciones del grupo motopropulsor gracias a su caja de cambios de cinco velocidades. Corrió en los Alpes y en el duro terreno de la Mille Miglia al volante de un 4CV, logrando numerosas victorias. Los modelos posteriores llevarán el nombre del lugar donde más disfrutaba perfeccionando su arte: las sinuosas carreteras alpinas.
La filosofía de Alpine
«Es esta fascinante sensación de control la que quería que los clientes sintieran al volante del vehículo que deseaba construir», afirma Jean Rédélé. Creó su propio vehículo deportivo revistiendo la mecánica del 4CV con una carrocería ligera de aluminio: el vehículo disminuyó 60 kg respecto a la versión original. Esta búsqueda de ligereza seguirá siendo un elemento central de los modelos Alpine. La marca nació oficialmente en junio de 1955 en Dieppe, la ciudad natal de Jean Rédélé, donde todavía se construyen hoy en día.
Creado en 1962, el A110 es una evolución de dos modelos anteriores, el A106 y el A108. Incluso hoy en día su estilo se reconoce a primera vista. Durante su increíble vida, el A110 ha triplicado su potencia y aumentado significativamente su rendimiento, mientras que su notable éxito en las carreras de rally se ha democratizado para los conductores urbanos.
Los vehículos Alpine se definen por tres principios: ligereza, agilidad y espíritu competitivo. Este ADN ha inspirado victorias en muchas disciplinas del deporte automovilístico. En los años 1960, Alpine logró ganar en las categorías de eficacia de las 24 Horas de Le Mans, antes de conseguir una victoria absoluta en 1978. La inversión de Renault también permitió al A110 ganar el primer trofeo del Campeonato Mundial de Rally en 1973.
El regreso de un icono
¡El Alpine A110 regresa con fuerza en 2017! El espíritu pionero de Jean Rédélé se reencarna en un vehículo que combina un grupo motopropulsor regulado con pericia y una carrocería delgada y ligera. Un modelo que revoluciona la jerarquía de los vehículos deportivos. Ganador de varios premios, es apreciado por los críticos del automóvil y los aficionados de Alpine, tanto los antiguos como los nuevos. Aún más emocionante de conducir que sus homónimos, el A110 une el pasado, el presente y el futuro de Alpine.