Los neumáticos, elementos clave en la comunicación entre el vehículo y la carretera, desempeñan un papel determinante en el desarrollo del carácter de un nuevo modelo. Gracias a la colaboración con Michelin para el A110, Alpine ha renovado la experiencia para equipar su primer vehículo eléctrico: el A290.
Un nuevo reto
En el A290, Alpine monta el motor eléctrico en la parte delantera. Michelin asumió el reto de mantener las sensaciones de conducción características de Alpine en este nuevo modelo, redefiniendo en esta ocasión tanto el dinamismo como el par. Para satisfacer la demanda de los conductores que buscan una conducción ejemplar, se ha desarrollado una tecnología de neumáticos específica.
Una comunicación única
La estrecha colaboración entre Alpine y Michelin, cada uno con voz y voto en las decisiones estratégicas, ha permitido revolucionar los códigos del sector. Era crucial dar con el tamaño óptimo de los neumáticos para lograr un delicado equilibrio entre rendimiento y eficiencia energética. Así, las pruebas intensivas realizadas en el centro de investigación de Michelin de Ladoux (Auvernia-Ródano-Alpes) han permitido desarrollar dos interesantes opciones de neumáticos para el A290.
Alpine y Michelin han elegido los neumáticos 225/40/R19, que aportan a este Alpine de nueva generación un diseño vigoroso que ilustra todo el saber hacer de los fabricantes. Estas dos opciones de neumáticos cumplen las expectativas de muchísimos fans. Los Pilot Sport S5, centrados en el rendimiento, se diferencian de los Pilot Sport EV por su énfasis en la eficiencia energética, gracias a una resistencia a la rodadura especialmente baja.
«Hemos prestado especial atención a la resistencia a la rodadura del neumático, sin reducir la adherencia ni la conducción, para ofrecer a este primer Alpine eléctrico la mejor autonomía posible, manteniendo las características dinámicas propias de la marca», explica Philippe Krief, director general de Alpine.
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